Por Lincoln Lande, VP, Desarrollo de Negocios
EDF Renewables Norteamérica
Los paneles solares montados en los tejados y en el suelo se han convertido en algo habitual en Estados Unidos, pero no se sorprenda si la próxima instalación solar que ve flota en el agua. La energía fotovoltaica flotante, también conocida como FPV o "floatovoltaica", es muy popular en los mercados asiáticos desde hace varios años y está empezando a ganar terreno en Estados Unidos. Desde California hasta Nueva Jersey, el desarrollo de la energía solar flotante se está expandiendo, y el equipo de Soluciones Distribuidas de EDF Renewables está a la vanguardia de esta emocionante tendencia.
La energía solar flotante tiene muchas ventajas, y una de las mayores es que no requiere tierra. Esta característica ha sido uno de los principales motores de la expansión de la FPV en Asia, donde los desarrolladores y proveedores han seguido mejorando la tecnología y han sacado al mercado productos nuevos y mejorados, con el apoyo de lo que se ha convertido en una sólida cadena de suministro.
Como resultado, la FPV se está acercando a la paridad con la energía fotovoltaica tradicional cuando se consideran los costes a lo largo de la vida útil de un proyecto, y esto ha llevado a una mayor adopción en los Estados Unidos, con más de 20 proyectos de FPV en funcionamiento en muchos estados. La FPV brilla más en lugares donde el terreno es excesivamente caro o simplemente no está disponible.
EDFR está construyendo actualmente un proyecto FPV de 1 MW en Florida. Los terrenos en Florida tienen un precio prohibitivo, por lo que la posibilidad de instalar un proyecto de tamaño de demostración en la balsa de retención de una central eléctrica ofrece una oportunidad única de construir generación local, así como una visión de las posibilidades futuras.
Hay que tener en cuenta que las localidades con precios inmobiliarios elevados suelen tener precios de la energía superiores a la media, lo que significa que la energía solar flotante puede ofrecer un ahorro real a los clientes. Otras ventajas de la FPV son la reducción de los costes de explotación y mantenimiento, la mejora del rendimiento de los paneles (gracias al efecto refrigerante de estar sobre el agua) e incluso beneficios medioambientales como la reducción de la evaporación y el crecimiento de algas.
La energía solar flotante es todavía una novedad en Estados Unidos, pero su éxito en el extranjero demuestra su enorme potencial. A medida que los índices de penetración de la energía solar sigan aumentando en Estados Unidos, la demanda de soluciones energéticas distribuidas flexibles y rentables seguirá siendo fuerte.
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Comentarios (1)
Suena muy bien, especialmente con los beneficios añadidos del efecto refrescante del agua.